Blockchain se extiende más allá de una base de datos pura, aprovechando la oportunidad de crear un registro permanente e irrompible de la propiedad.
Cada transacción es rastreable, con marca de tiempo e indiscutible, ya que blockchain podría proporcionar un registro de propiedad altamente seguro que no puede ser manipulado.
A diferencia del almacenamiento tradicional, que, si se pierde, significa muchas veces la pérdida de información importante, blockchain permite que la información sobreviva ante cualquier desastre que se presente.

Proceso
Para lograrlo, generamos un algoritmo (código hash). Este hash, sin importar la longitud o el peso de la obra, siempre es un proceso criptográfico de una sola vía, por lo que por un lado garantiza la integridad de los datos (si se cambiara un sólo espacio o coma del documento, el algoritmo resultante sería completamente distinto) y por el otro su privacidad, ya que no es posible obtener el contenido original de la obra a partir de su hash resultante.
Obtenido el hash de la obra, lo combinamos en un documento de tipo JSON donde incluimos el nombre del titular, nombre de la obra, hash del documento y otros datos y lo guardamos en la Blockchain, una base de datos descentralizada e inmutable, lo cual permite demostrar de manera irrefutable, que la obra existió antes del tiempo en que fue publicada, que su contenido es el que el hash demuestra, que no ha sido modificada y que fue registrada por la persona que aparece en los datos adicionales del JSON.
Nosotros podemos proporcionarle un sello digital de prueba de existencia, almacenado en Blockchain y verificable de forma independiente.